Sabor agridulce en la visita a los campos de Pepe Rojo, donde el resultado de 14 a 10 hace pensar que el partido ha sido muy ajustado. Y así ha sido, las dos partes del encuentro fueron cada una para un equipo.
En la primera mitad los locales fueron superiores, los sevillanos fueron sancionados con 9 golpes de castigo y tuvieron poco acierto en las fases estáticas, hecho que fue un lastre para su juego y se fueron al descanso con 8-0 en el marcador.
En la segunda mitad el acierto en las fases de conquista fue mayor y eso hizo que los científicos dispusieran de más balones de ataque. Se jugaba en campo local, el asedio de los sevillanos en la zona de 22 era continuado, llegaban las indisciplinas locales, hasta 4 golpes de castigo a favor seguidos pero sin conseguir materializarlo en puntos.
Pero la insistencia dio sus frutos. Gran juego de la delantera sevillana demostrando la fortaleza en el pick and go y llegaron los ensayos de Rubiales y Caruz, en el último minuto del partido que daba el bonus defensivo.
Tras el encuentro declaraba el técnico científico, Eusebio Quevedo: “Contentos con la actitud de los jugadores y el buen juego desarrollado en varias fases del encuentro. Pero un tanto descontentos con el resultado que podría haber sido mejor ya que durante gran parte de la segunda parte el juego se desarrolló a 5 metros de la zona de ensayo local. La semana que viene nos enfrentaremos a Alcobendas, un potente equipo que nos hará ver en qué nivel estamos.”
Fotografía: Juan Carlos Rodríguez


				